LOS BANCOS SE NIEGAN A DEVOLVER LOS GASTOS DE HIPOTECA Y OBLIGAN DE NUEVO A PRESENTAR DEMANDAS
A pesar de la Sentencia del Supremo que dictaminaba la abusividad de que los gastos de formalización de los préstamos hipotecarios fueran a cargo del consumidor, la historia se repite y, como ocurre con las cláusulas suelo, evitan devolver el dinero abonado por sus clientes obligándoles a acudir a la vía judicial.
La Sentencia del Supremo de 23 de diciembre de 2015, indicaba que la imputación en exclusiva de los gastos al consumidor es una cláusula abusiva, al no permitir una reciprocidad en la distribución de los gastos producidos, sino que todos recaen sobre el hipotecante, ocasionándole un desequilibrio relevante, que no hubiera aceptado razonablemente en una negociación individualizada.
Desde ese momento y de forma masiva los consumidores hipotecados presentaron reclamaciones para solicitar la devolución de las cantidades abonadas en concepto de: notaría, gestoría, registro de la propiedad, tasación e impuesto de Actos Jurídicos Documentados por la escritura del préstamo hipotecario. Aunque estos gastos varían según la Comunidad Autónoma, la entidad bancaria y el año de constitución de la hipoteca, aproximadamente como media pueden ascender a 3.000€.
La práctica totalidad de estas reclamaciones se están encontrando de forma sistemática con la misma respuesta negativa por parte de los bancos. Son esporádicos aquellos casos en los que algunas entidades proponen una cantidad y llegar a un acuerdo de forma extrajudicial, aunque ese importe no contempla la suma total de los gastos reclamados.
¿Qué está ocurriendo con las nuevas hipotecas?
A pesar de que las entidades defienden el cobro de dichos gastos, lo cierto es que algunas han dejado de repercutírselos a los nuevos hipotecados, aunque a cambio establecen o incrementan otras comisiones y gastos.
La única vía que por el momento parece la más efectiva es la judicial, para que sea un juez quien obligue a la entidad a devolver el dinero pagado en virtud de la cláusula de gastos a cargo del prestatario, otra más para añadir a la lista de cláusulas abusivas que podemos encontrar en nuestra hipoteca.