Tanto los clientes que compraron acciones en el proceso de salida a bolsa de Bankia (entre el 7 de mayo de 2011, fecha en la que se publicó el folleto de información, y el 20 de julio de 2011, día de la salida a bolsa) y que no accedieron  al proceso de devolución extrajudicial puesto en marcha por Bankia, como para aquellos que compraron las acciones después de la salida a bolsa y antes de la reformulación de las cuentas de Bankia, es decir, entre el 7 de mayo de 2011 (fecha de publicación del folleto de la OPS) y el 25 de mayo de 2012 (día en que se publicaron las verdaderas cuentas de la entidad, que habían sido falseadas por la dirección del banco para poder salir a bolsa), pueden reclamar esa inversión. El falseamiento de las cuentas anuales, y la falta de información veraz del folleto que acompañó la salida a bolsa de Bankia, no reflejaron una imagen fiel de la empresa, viciando la adquisición de las acciones por parte de los inversores que se fiaron de la información emitida por la entidad. La normativa exige que esta información sea veraz y objetiva, y es por ello que si acreditan que no reflejaba la imagen fiel del banco, pueden reclamar las pérdidas sufridas.